• 02/06/2021
  • Multiassist
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Aunque la lluvia, el frío o los cambios de temperatura no son por sí mismos factores de riesgo para contraer enfermedades, sí es un hecho que los cambios estacionales incrementan el número de personas enfermas, principalmente de las vías respiratorias.

Esto se debe a que la lluvia y el descenso de la temperatura hacen que las personas permanezcan más tiempo en interiores, con las ventanas cerradas y sin aire que circule. Esto aumenta las probabilidades de que se propaguen los gérmenes y se contagien los virus y bacterias que ocasionan las enfermedades.

Por eso, para evitar enfermarte en  temporada lluviosa, la prevención es el arma más efectiva. La buena alimentación y la higiene son fundamentales, en ésta y en cualquier época del año. Toma en cuenta estos consejos:

Toma bebidas calientes: siempre caen bien cuando hace frío y, la mejor parte, es que cuidan tu sistema respiratorio y demás partes del cuerpo como la garganta, por ejemplo, ante el clima frío de la lluvia. Chocolate caliente, tés, café y leche caliente son excelentes aliados.

Usa ropa abrigadora: las chaquetas de cuero, bufandas, gorritos y calcetines son una buena idea de prendas de vestir que no permitirán que te resfríes fácilmente. Saca los suéteres de tu armario y disponte a llevar siempre uno contigo.

Usa zapatos cerrados: de ser posible que sean impermeables. Quizá por la naturaleza de tu trabajo no puedes usar botas, pero procura que a tu calzado no le entre agua.

Aumenta el consumo de frutas y verduras: preferiblemente con alto nivel de vitaminas C y minerales, por ejemplo: naranja, espinaca, brócoli, fresas y kiwi. 

Evita acumulaciones de agua en tu hogar: para evitar la proliferación de mosquitos, que podrían ser portadores de enfermedades como dengue, chikungunya y Zika, no dejes que el agua de lluvia se acumule y quede estancada en espacios o recipientes que estén fuera de tu casa. Quítalos, tápalos o colócalos bocabajo, pues el agua estancada es el lugar ideal para la reproducción de los mosquitos.

 

Intenta no acudir a lugares concurridos cuando te enfermas de las vías respiratorias. Al toser y estornudar, cubre nariz y boca con el antebrazo o con un pañuelo. Y si te mojaste inevitablemente, recuerda llegar a casa a bañarte, no importa que sea de noche, pues esto reducirá el riesgo de que te resfríes. Si presentas algún síntoma recuerda que dispones de orientación médica 24/7 en los planes de Asistencia Gastos Médicos de MULTIASSIST.